Éfracsis
La representación verbal de una figura visual [...] la descripción escrita de una obra de arte, realizada como ejercicio retórico o literario.
Advertencia: este texto es un poco friki. Tiene que ver con unos experimentos que empecé a hacer al rededor de uno de los temas que más me apasiona: la imagen y su representación. Pero que esto no te detenga, sigue leyendo, me parece que el resultado es simpático y entretenido.
El origen
Hace poco leí una entrevista que Olivier Collet le hizo a Jeff Wall (Olivier es un buen amigo; Jeff Wall mi fotógrafo favorito). En algún punto, Wall habla sobre la relación de la imagen y la literatura:
Creo que todo arte pictórico tiene un aspecto “literario” inherente. Puede que se deba simplemente a que una imagen siempre nos muestra algo concreto, algún suceso, alguna situación. Si incluso mencionamos la imagen o utilizamos el lenguaje en relación con nuestra experiencia de ella, surge ese aspecto literario. El arte pictórico es, por tanto, un tipo de escritura o contiene un tipo de escritura. En realidad, esta escritura no tiene por qué estar “escrita" para estar presente.
Dado que los caminos de la mente son inescrutables, Puede que esa parte de la entrevista fuera el génesis de los experimentos que he titulado RE:fracsis. Un ejercicio circular sobre la representación textual, mental y visual de una imagen.
Interpretamos una imagen al verla.
La describimos con palabras al comunicarla.
El lector-espectador-receptor la procesa en la mente y la recrea.
El título viene de RE: —que se usa en las respuestas de los correos electrónicos— y de la éfracsis:
La representación verbal de una figura visual. La palabra se refiere a la descripción escrita de una obra de arte, realizada como ejercicio retórico o literario, a menudo utilizada en la forma adjetival «ecfrástico/a».
Suena como una palabra ajena, pero si alguna vez han leído El evangelio según Jesucristo de Saramago, el inicio del libro es, precisamente, una éfracis de la crucificción de Jesús. De hecho, hacemos estas representaciones constantemente.
Mucha teoría, ¿cuál es la práctica?
El ejercicio consiste en hacer patente el ciclo de la representación: convertir una imagen en texto, que quien la lea la re-interprete y luego ir de vuelta a la imagen. Adicionalmente, para hacerlo más terrorifico entretenido, le pedí a un “cerebro” de silicio que aportara su idea.
El primer experimento surgió cuando estaba leyendo El cielo de la Selva de Elaine Vilar Madruga —de los mejores libros que he leído este año— y paseaba a mi perro. Así que hice la éfracis de una foto de ese día. Aquí lo tienen:
RE:cfrasis de una tarde de verano
Una mano [mía] sostiene un libro con una portada llamativa: sobre un gradiente de amarillo a verde hay siete elementos dibujados de forma realista. De izquierda a derecha y de arriba abajo aparecen: una mariposa, una calavera (humana), una gallina blanca, un rosario, un cuchillo (o machete), un grillo verde, una urna de barro. A la derecha de las imágen…
Si te interesan los temas relacionados a cómo funciona la mente o la imagen, dejo otros dos textos relacionados que he escrito:
Cameras as weapons, sobre la proliferación de las cámaras y su uso para documentar y amedrentar (en inglés).
Inspirado en Leer la mente de Jorge Volpi, escribí este texto para 148p:
La insoportable construcción del ser
Parte de 148p: historias de ficción (o auto-ficción) contadas en ciento cuarenta y ocho palabras exactas.
— jl
tarde-noche del martes,
desde mi escritorio, con viento fresco de pre-otoño.